Al inicio de la pandemia, los inversionistas en tecnología pensaron que varias empresas desaparecerían. Por el contrario, en unos cuantos meses, grandes cantidades de dinero se movilizaron hacia todo tipo de emprendimientos tecnológicos, alcanzando cotizaciones récord en los mercados financieros.
Sin embargo, el contexto inflacionario mundial y la inestabilidad financiera han generado una baja en los precios de las acciones de aproximadamente 30% en lo que va del año. Se estima que la valuación conjunta de Google, Apple, Microsoft, Amazon, Tesla y Facebook se redujo en 3,5 billones de dólares.
Un síntoma de la gravedad de la situación es que grandes empresas como Meta, Twitter, Salesforce o Microsoft hayan decidido congelar las contrataciones, y otras como Netflix, Paypal o Robinhood cometieron despidos.
Las pequeñas empresas tecnológicas son quienes corren más riesgos de cara al futuro, ya que los inversionistas suelen confiar en las empresas con más trayectoria.
Será importante observar cuanto dura el revés del sector tecnológico, ya que si se recupera prontamente, los inversores podrían volver a elegir al sector.
Tipo de Riesgo: Financiero
Implicancias: a) Pérdida de puestos laborales, b) Quiebre de start-ups, c) Falta de inversiones