La guerra de Ucrania no pareciera ser el único conflicto que tenga impacto internacional, distintos focos de inestabilidad parecen activarse por todo el mundo

Entramos al segundo año del conflicto derivado por la invasión de Rusia a Ucrania, y no se ven señales que hagan pensar en una pronta solución del mismo. Rusia intensifica los bombardeos a las ciudades ucranianas, y el resto del mundo occidental aumenta la ayuda hacia Ucrania. Adicionalmente se empiezan a ver apoyos preocupantes de algunas potencias a la posición rusa, lo que generaría una potencial escalada del conflicto a niveles globales con riesgos mucho mayores. Esta situación nos obliga a preguntarnos sobre la duración y posible evolución del conflicto. Es difícil hacer hipótesis sobre qué posición tomarán los dos países involucrados directamente, y los países que observan con mayor o menor grado de pasividad. No está claro cómo seguirá el conflicto, ni sus consecuencias en el resto del mundo. Por otro lado tenemos la situación generada por el intento de intromisión de China en Taiwán, que podría tener un potencial impacto económico en el mundo dada la importancia de Taiwán en la producción de semiconductores. China, además, está aumentando de manera preocupante su relación con los gobiernos de los países de nuestra región, ofreciendo inversiones y financiamiento, quedando con posiciones estratégicas en varios países. Esto debe verse con preocupación ya que involucraría de manera directa o indirecta a los países de la región en un eventual conflicto.

Adicionalmente hay focos de problemas en Turquía, Armenia, Irán, Pakistán, y en varios países de África. Esto genera un mundo más volátil con implicancias de cierto riesgo para los países de la región. Por un lado los flujos de capitales suelen estar reacios a buscar inversiones en mercados emergentes en épocas de alta volatilidad política, y por otro lado, muchos de los países en conflicto son clientes o proveedores de empresas de varios de los países latinoamericanos, lo que puede generar algunos problemas económicos y de competitividad.

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